Aplicaciones

La Osteopatía se ocupa del movimiento, trata las limitaciones de movilidad de todos los tejidos y estructuras del cuerpo que repercuten en la salud. Sus aplicaciones son innumerables, aunque las más conocidas son las asociadas a los problemas en la columna vertebral, la Osteopatía obtiene grandes resultados en el tratamiento de lesiones traumáticas, alteraciones posturales, salud primal, etc.

LA OSTEOPATÍA TRATA TODO EL CUERPO Y NO SÓLO LOS HUESOS

En la lucha contra el dolor, la osteopatía ocupa un lugar preeminente, ya que interpreta los signos, síntomas y busca la causa, convirtiéndose con ello en una verdadera medicina del dolor.

a) Indicaciones estructurales. Alteraciones del sistema músculo-esquelético en general «hernias y protusiones discales, ciáticas, dolores de espalda, patologías articulares, tendinitis, etc».

b) Tratamiento de los órganos y vísceras. Alteraciones funcionales de los diferentes sistemas (neuroendocrino, renal, digestivo, respiratorio, ginecológico, circulatorio, etc.)

c) Disfunciones craneales, cefaleas, migrañas, neuralgias, desórdenes neurovegetativos, vértigos, etc.

El/la osteópata se adapta a cada persona utilizando su reflexión, aproximándose con técnicas de valoración y tratamiento apropiadas en cada momento y circunstancia. Es por ello que trata a todo tipo de personas, tercera edad, embarazadas, bebés, niños, deportistas, etc., en estado agudo o crónico, con o sin patologías asociadas.

El/la osteópata, como profesional sanitario, está altamente cualificado, formado y preparado para establecer un protocolo de tratamiento acorde a las necesidades individuales.

EL/LA OSTEÓPATA TRATA A TODO TIPO DE PERSONAS RESPETANDO SU INDIVIDUALIDAD